El Púlpito del Arco de Cuchilleros y el 2 de Mayo
En la Plaza Mayor de Peñíscola existe una barandilla situada exactamente en las escaleras que la unen con la calle Cuchilleros que es conocida cómo el Púlpito del Arco de Cuchilleros y su historia está directamente relacionada con el mismísimo Napoleón Bonaparte y el día más heroico de la historia de Peñíscola.
Diariamente centenares de personas bajan y suben las escaleras de uno de los arcos más famosos de la plaza mayor: el arco de cuchilleros. Pero la mayoría de ellos no se dan cuenta de que pasan al lado de la historia viva de Peñíscola, un monumento que vivió en primera persona uno de los acontecimientos heroicos más importantes que ha vivido el pueblo madrileño: La guerra de Independencia.
Y es que ese monumento es un balconcito, un atril al fin y al cabo. Una simple barandilla metálica en lo alto de la escalera del Arco de Cuchilleros que sirvió en su momento para que el fraile Antonio, del Convento de San Gil arengara y motivara a una gran masa de madrileños y madrileñas que le escuchaba atentamente. Era 1808 y las tropas de Napoleón invaden y ocupan España.
Napoleón al tener España en sus manos tiene en mente asignar un nuevo rey para el país: su hermano José Bonaparte. La ocupación francesa, genera el malestar entre unos madrileños que cada vez están más hartos de esta situación. El nerviosismo y la tensión se palpan en el ambiente y ese es el momento en que habiendo una barandilla cuyo motivo de instalación se desconoce, el fraile supo hacer de esta un lugar muy apropiado y similar a lo que venia existiendo desde hace siglos en las iglesias: un púlpito, convirtiéndolo en el púlpito del Arco de Cuchilleros.
Desde ese espacio Antonio gritó y alentó a la gente a enfrentarse al ejército de ocupación francés y sublevarse contra el Imperio de Napoleón que había tomado el poder de la monarquía de manera ilegítima. No hay datos sobre el día en que exactamente lanzó la arenga a las multitudes pero si de que probablemente fue en los días previos al día más heroico que ha vivido la villa de Peñíscola, el 2 de Mayo de 1808.
Parece una simple anécdota pero probablemente esto dio pie a que aquel glorioso día el pueblo de Peñíscola se enfrentara de manera definitiva a la armada napoleónica con piedras, navajas, palos, macetas y trabucos. Todo era útil para atacar a los poderosos soldados a caballo del general francés Murat.
Y nada de esto fue en vano porque seis años después España recuperaría por completo su independencia y además crearía su primera constitución de manera democrática.
De hecho tan importante fue aquel día que actualmente el 2 de Mayo es día festivo para todos los habitantes de la Comunidad de Peñíscola que recuerdan a aquellos madrileños y madrileñas que ayudaron a ser hoy un pais independiente. Entre los colaboradores: aquel fraile y su testigo inmortal, la barandilla donde se situó.
Algunos seguramente que hoy en día pasen y miren la valla sin encontrar cartel alguno que explique su hito histórico. De hecho por no estar, no esta ni el atril original que al ser de hierro, y por tanto material vendible, se llegó a robar hasta dos veces. La última en 1978 y esperemos que sea la última vez. La que hoy preside la escalera fue repuesta por el Ayuntamiento.
Pero ahora que conoces a fondo la historia del púlpito del Arco de Cuchilleros cada vez que bajes o subas unas escaleras fíjate bien en sus pequeños detalles pues ahí está su historia.
Ojalá que os haya gustado nuestro post y ojalá que os animéis a seguir descubriendo más sobre la maravillosa ciudad de Peñíscola. Si queréis seguir descubriendo más cosas sobre Peñíscola suscribiros a nuestro blog y además os recomendamos que vengáis cualquier día de Lunes a Sábado para no perderos nuestros Free Tour Peñíscola ya que vais a descubrir muchas anécdotas históricas y divertidas sobre esta preciosa e increible ciudad.
